Ya estamos entrando en la segunda mitad de diciembre, así que me he puesto manos a la obra con mi balance.
Al igual que lo hago desde hace 3 años, comparto contigo mis propios avances para invitarte a revisar los tuyos 😉
Cómo te explico en detalle en mi artículo sobre la forma de realizar una evaluación personal del año, es el momento de hacer el balance de mi satisfacción, mis proyectos y hábitos para poder preparar el año siguiente. Es como hacer un alto por el camino antes de seguir avanzando.
Si te animas a realizar tu propio balance personal, entonces estoy seguro de que te interesará mi agenda anual CreaTuVida.
Para hacer mi balance, reviso mis objetivos o propósitos de año, manteniendo siempre presente mi visión personal a 5 años (mi rumbo).
Mi nivel de satisfacción:
Este año ha sido un año algo complicado y de muchos contrastes para mí.
A nivel laboral, enero empezó con el despido de 20 compañer@s. Y siguieron otros muchos cambios: fin del teletrabajo, cambio de puesto en mi empresa, deslocalización de parte de la actividad... En fin, un año para olvidar a nivel profesional, y lo malo es que las perspectivas no son mejores para el año que viene.
En cuanto a mi proyecto personal, he puesto en marcha nuevas iniciativas pero no he conseguido los resultados esperados en cuanto a mi servicio de coaching, mi curso online o la venta de la agenda.
A esto se suma el contexto tan hostil con la guerra de Ucrania, la subida de los precios, las olas de calor... Y aunque intento quedarme al margen de este tipo de noticias, este año no he conseguido evitar contagiarme de cierto pesimismo.
La suma de todo esto me ha llevado a dudar, preocuparme, enfadarme, cuestionarme... Así que termino el año bastante saturado mentalmente.
Pero no todo ha sido negativo este año, ni mucho menos. He seguido disfrutando de todo lo bueno que tengo en la vida y he podido avanzar en muchos aspectos importantes para mí, de la mano de algunos de mis objetivos que te comento más adelante.
Aquí te dejo mi evaluación realizada con la plantilla disponible en el balance de la agenda CreaTuVida:
Al igual que lo hice el año pasado, he pintado con una línea de otro color el nivel que quisiera alcanzar al final del año. Es una forma de identificar las áreas con más margen de mejora.
Mis objetivos personales:
Este año, me había marcado 4 objetivos foco, que han sido los prioritarios para mi:
- Preparar un fiestón para celebrar mis 40 años. En junio he conseguido organizar un fin de semana con más de 80 personas, entre familia y amig@s. Fue como organizar una pequeña boda pero mereció la pena. Me encantó poder juntar a muchas de las personas que cuentan en mi vida para pasar un momento increíble. Repetiré para mis 45 años 😉

- Grabar y lanzar mi curso on-line "Alcanza tus metas con sentido". Ha sido todo un reto para mí grabar el curso y montar mi Academia online. Conseguí lanzarlo en mayo y he tenido a mis primer@s alumn@s, aunque todavía tengo pendiente darle algo más de difusión.
- Crear un diario infantil con mi hija Candela. Hemos conseguido diseñar y lanzar el diario de felicidad Me Siento Bien, pensado para niñ@s de entre 8 y 12 años. Ha sido un proyecto muy especial con mi hija Candela. Así ha podido descubrir de forma entretenida todas las etapas de un pequeño proyecto de emprendimiento. Y hemos implicado también a mi hijo mediano Diego como probador oficial 😉


- Definir y poner en marcha una estrategia de Marketing Digital. Este año me he apuntado a un mentoring grupal con Ana Sastre de Marketing Libélula. Está siendo una bonita experiencia y me ha ayudado a definir mi estrategia de marketing. Lo que pasa es que he tenido muy poco tiempo para avanzar desde el verano.
Además de estos objetivos foco, me había marcado otros objetivos secundarios para avanzar si encontraba el tiempo:
- Hacer algunos viajes en el extranjero con la familia. Teníamos ganas de viajar un poco ahora que el Covid nos da una tregua. Pues bien, este año nos ha traído bonitos viajes: New York con mi mujer en abril, un festival de música en Francia en julio, Holanda y Alemania en familia este verano con un intercambio de casas y Navidad en Francia con mis hermanos. Sienta muy bien volver a viajar 😉


- Bailar Swing con mi mujer. En enero empezamos a bailar con clases a domicilio con otra pareja de amig@s ¡Me encanta! Pero no hemos encontrado la forma de mantenerlo en el tiempo, así que de momento se ha quedado como una primera toma de contacto.
- Seguir colaborando con la Asociación Proyecto Hombre. En línea con el año pasado, he seguido impartiendo un taller de Ofimática y he participado puntualmente con los eventos de la asociación.
- Tocar música con mi familia y amig@s. Un año más, la guitarra me ha seguido acompañando a todos lados así que hemos tenido muchas oportunidades de tocar y cantar.
- Hacer surf con los niños. Este año, no hemos ido apenas a la playa así que no he tenido mucha ocasión de hacer surf.
Mis nuevos hábitos:
Como te comentaba antes, el 2022 ha sido un año de cambios y de mucha incertidumbre profesional. He observado como esta situación complicada ha afectado a mis buenos hábitos. Por eso, este año, más que hacer mejoras en mis hábitos, lo que he intentado es no dar un paso atrás.
Aún así, he conseguido hacer algunos pequeños cambios en mis hábitos saludables:
- Comer con atención plena. Me he tomado muy en serio tomarme el primer bocado de cada comida con atención plena. No lo tengo todavía integrado al 100% pero me está viniendo muy bien para conectar con el momento presente a lo largo del día.
- Registrar las horas que dedico a mis proyectos personales. Desde el inicio del año, estoy registrando cada día las horas que dedico a cada cosa. Así tengo una visión real del tiempo que me ocupa cada actividad.
Lo que no he conseguido ha sido retomar mis 15 minutos de gimnasia al final del día. Creo que no tocaba este año.
Éxitos, orgullos, dificultades y aprendizajes:
Como te comentaba antes, el 2022 ha sido un año de grandes contrastes: éxitos y dificultades, alegrías y preocupaciones.
A nivel profesional, mi empresa ha dado un giro a 180º y nos ha dejado a todos desconcertados. En cuanto a mis proyectos personales, he seguido avanzando pero no he conseguido los resultados que esperaba.
Me siento muy orgulloso principalmente por 2 motivos:
- Por haber organizado mi fiestón de cumpleaños pese a las dificultades.
- Por el proyecto que estamos haciendo con mi hija Candela con el diario Me Siento Bien y el aprendizaje tan grande que supone para los dos.
Como dificultad, he observado que me cuesta encajar el cambio en mi situación profesional. Me lleva a dudar de mí, más de lo que me imaginaba.
Y cómo aprendizaje, me quedo con la importancia de seguir trabajando para cultivar una actitud positiva, incluso en las situaciones difíciles.
Mi balance:
Como has podido ver, el 2022 ha sido un año agridulce. Eso sí, me ha permitido confirmar lo importante que es cuidar cada área de mi vida para que cuando una se tambalea, el resto me ayude a mantener el equilibrio.
Mirando hacia delante, siento la necesidad de hacer algunos cambios en 2023 para avanzar más ligero y sin tanto ruido mental. No tengo todavía claros mis objetivos para el 2023, pero sé que dedicaré tiempo y energía a un cambio profesional y que intentaré también reforzar mi capacidad de resiliencia. Al final la vida es cambio y no quiero que las circunstancias externas tengan tanto impacto sobre mi paz interior.
¡Un abrazo!
Sylvain
Te toca a ti
Te animo a hacer tu propio balance del año y a compartir algunos de tus logros en los comentarios.
La idea es que puedas aprovechar el final del año para reflexionar sobre tu situación actual y ver los cambios que quieres plantearte.
Si te ha gustado este post no dudes en compartirlo: